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Reduzca la ingesta de azúcares añadidos y calorías con estos sabrosos consejos y trucos.

Horneado y cocinado

La compota de manzana sin edulcorar puede sustituir una parte del azúcar de una receta. Puede que también necesite menos aceite: adapte la receta según sea necesario para obtener el sabor y la textura que desee. O pruebe a utilizar un edulcorante sin calorías adecuado para cocinar y hornear.

Postres y dulces

En lugar de disfrutar de un postre tradicional a base de azúcar, disfrute del dulzor natural de la fruta. Los alimentos frescos, congelados y enlatados (en su propio jugo o agua) son una buena opción. Pruébelos cocidos, asados, estofados o escalfados.

Aliños y salsas

Sustituya los aliños de ensalada embotellados, el kétchup, la salsa de tomate y la salsa de barbacoa, que pueden contener muchos azúcares añadidos, con versiones caseras, de modo que pueda controlar la cantidad de azúcar que les añade.

Mezcla de bocadillos y granola

Hágalos usted mismo, sin todos los azúcares añadidos. Combine sus frutos secos y semillas favoritos (sin sal o con muy poca sal), pasas y frutas secas (sin edulcorar), copos de avena y cereales integrales (sin azúcar/sin glasear), y evite así los dulces.

Refrescos

Sustituya las bebidas azucaradas por agua natural o con gas con sabor a menta, cítricos, pepino o un poco de jugo 100% de fruta.

Té y café

Reduzca el consumo de azúcares (incluida la miel y el sirope de agave) gradualmente hasta que su paladar se adapte a menos dulzor.  Pruebe añadir sabores naturales como canela, cítricos, menta o nuez moscada. 

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